La demanda de una vivienda propia fue lo que comenzó una de las luchas más importantes del Movimiento Antorchista en Chiapas, y en 18 años de una ardua lucha, la suma de amas de casa, obreros, campesinos, maestros, niños, niñas y jóvenes, han procurado crear el modelo de colonia en Chiapas que propone nuestra organización, la colonia Unidad Antorchista en Tuxtla Gutiérrez, que este año se convierte en un adulto cumpliendo 18 aniversarios.
Justo hoy, 13 de Diciembre, pero del año 2007, nuestros compañeros de la colonia, llegaron a ese asentamiento, y como ellos lo han testificado no fue nada más fácil, primero los recibieron con garrotes y amenazas porque creían que llegaban a invadir; y en segundo lugar, llegaron a un lugar en donde sólo había grandes zacate, arbustos y tierra. Y había que comenzar de cero, dos familias fueron pioneros a lo que parecía un lugar desolado, poco a poco comenzaron a levantar un techo; lentamente todo esto se fue poblando, las familias fueron ocupando su lote, y se fueron sumando a la lucha por la construcción de un lugar digna donde vivir.
Sin duda la colonia Unidad Antorchista, es modelo y ejemplo de lo que una colonia debe tener, servicios básicos, educación, salud, cultura, deporte, y lo más importante unión de la población y fraternidad ante las circunstancias buenas o difíciles. Si nosotros comparamos con lo que cifras oficiales han dejado en evidencia, nos podremos dar cuenta que en esta colonia a logrado lo que muchas no, en décadas. Por ejemplo, el pasado 13 de agosto, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) presentó los resultados más recientes sobre la pobreza multidimensional en México, correspondientes al año 2024, Chiapas es el estado en donde el 66.0% de su población vive en pobreza multidimensional, siendo el mayor porcentaje y así mismo en pobreza extrema con 27.1%, también presenta las mayores carencias en varios servicios básicos: rezago educativo cerca de 2 millones de personas; sin acceso a servicios de salud 3.7 millones; sin seguridad social más de 4.4 millones y pobreza extrema más de 1.5 millones de personas.
Y aquí hago un paréntesis para llamar a toda la población a que se una a esta lucha, pues es importante sumar fuerzas, y no restar con intrigas, atropellos o amenazas; por que es cierto, tenemos una clínica en la colonia, que solo funciona en campañas o proyectos a corto plazo; como también nos quejamos que a la SEP no contrata a nuestros maestros y que nuestros hijos han tenido que luchar para ser integrados a programas federales; pero estos dos problemas no son culpa de Antorcha, ni de los que militan en la organización, ni de los fundadores, nada más es culpabilidad y responsabilidad del gobierno porque es el que ha ignorado a la colonia para no darnos médicos, no darnos maestros, en proyectos que la gente ya inició y en dónde lo único que pedimos es que se contrate al personal y el servicio de salud funcione permanente, y que la calidad de los estudiantes mejore.
Hoy los antorchistas del estado estamos orgullosos de ver a esta colonia convertirse en un adulto, y ver cómo las nuevas generaciones han sostenido esta lucha y se han puesto al frente con la bandera de antorcha; cómo han entendido la necesidad de contar con este instrumento organizativo, como condición indispensable para lograr el verdadero cambio social en nuestra patría.
La Unidad Antorchista constituye una prueba palpable, para todo aquel que quiera ver, de lo que Antorcha quiere y busca para los chiapanecos, porque se pueden decir muchas cosas, pero no hay nada más valioso para convencer al ser humano que mostrarle con hechos cómo concebimos nosotros una vida digna para todos.
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